RECONOCEN EN CHICAGO A REGIOMONTANO COMO MAESTRO DE WUSHU-KUNG FU
· Blas Hernández, destacado exponente del arte marcial chino en USA
· Vívelo Hoy, de Chicago publica amplio reportaje del maestro mexicano
· Fue alumno de Francisco Valles pionero del Wushu en México
Lic. Felipe Guerra García
Millones de mexicanos que emigraron a Estados Unidos por el sueño americano, han tenido sobresaliente desempeño honesto y exitoso en muchas áreas de oportunidades.
Son dignos ejemplos de tenacidad, dedicación y honestidad, respetuosos del país que les abrió las puertas.
Tal es el caso del regiomontano Blas Hernández quien, como el de muchos otros paisanos de varias ciudades de nuest
ro México residentes en Estados Unidos, es un personaje muy reconocido por su calidad humana y por ser ciudadano ejemplar impulsor del Wushu, tradicional arte marcial chino.
Con frecuencia varios medios de comunicación: prensa, radio, televisión e Internet, le brindan espacio y tiempo con
reportajes para dar a conocer sus actividades y lo notable es que se trata de un paisano, como muchos otros, resid
ente en la Unión Americana donde pone muy en alto el nombre de México.
EXCELENTE REPORTAJE DE VIVELO HOY
Recientemente el prestigiado medio de comunicación Vívelo Hoy, dedicó tres páginas en las que publica un amplio reportaje bien elaborado y documentado, firmado por el cronista Alejandro Yanun y graficas de William Camargo, titulado: Las mujeres de Chicago se defienden gracias al Kung-Fu,(www.vivelohoy.com/deportes/8468908/las-mujeres-se-defienden-con-kung-fu) además, José Luis Sánchez Pando le realiza una estupenda entrevista televisiva sobre el tema, cuyo video puede ser visto en el link líneas antes señalada.
En el reportaje se da a conocer las actividades de Blas Hernández, quien recién anunció el inicio de cursos gratuitos de defensa personal, no sin antes describir en síntesis la labor que, desde hace tres décadas, realiza en Chicago el entusiasta regiomontano.
Con testimonios de madres de familia, jóvenes, adultos y niños, confirman lo que representa para ellos el Wushu-Kung Fu y la importancia de saber competir y defenderse ante la inseguridad, prevenir la violencia de género y maltrato de mujeres que se registra en la comunidad.
Vívelo Hoy reseña además la reconocida trayectoria del mexicano Blas Hernández, ferviente impulsor del arte marcial chino, y sobre el curso de defensa personal detalla las técnicas y estrategias que transmite a los participantes.
SU INICIO EN EL WUSHU-KUNG FU EN MÉXICO
El profesor regiomontano tiene amplia experiencia, abrazó la vocación por el arte marcial chino desde la década de los 80 en Monterrey, metrópoli regiomontana en Nuevo León de donde es originario.
Se incorporó a Wulin Instituto de Wushu, A. C. fundado en Monterrey por el maestro Francisco Valles Quintana, su primer instructor en esta disciplina.
Cabe destacar que el maestro Valles Quintana desde 1968 se inició en el Kung Fu capacitado por los maestros chinos Moc Kan Sent y posteriormente con Tong Jie Xui y Chick Chiu Tang.
Una vez ya fincada su residencia en Monterrey donde abrió su primer academia de Kung Fu, Francisco Valles también fue competidor enfrentando a otros exponentes de diferentes disciplinas como el Karate-Do estilos Shito-Ryu, Goju-Ryu, el coreano Tae Kwon Do, Lima Lama Karate Polinesio en torneos nacionales de Artes Marciales.
Por su destacada labor como instructor y competidor, en los inicios de los 70 fue reconocido por la Federación Mexicana de Karate y Artes Marciales Afines, que era presidida por el fundador de la misma Dr. Manuel Mondragón y Kalb, y la Comisión Técnica de la federación, previo examen, le otorgó la Cinta Negra.
Valles, por recomendación de sus primeros maestros, viajó a la República Popular de China para aprender la esencia del verdadero arte marcial chino tradicional y contemporáneo y moderno, y en calidad de alumno (Tudi) tuvo a su verdadero maestro tutor (Shifu) Qian Ywanze, por lo tanto, se convirtió en el primer mexicano oficialmente certificado en China ahora formalmente como Shifu de Wushu y por ende iniciador de este deporte en México.
Avalado por la Asociación de Wushu de China, máximo organismo de esta disciplina, el maestro Valles solicitó a los directivos que autorizaran al maestro Qian Ywanze emigrar a México en calidad de maestro para difundir el Wushu en Monterrey y realizar giras de exhibición por el país para impulsarlo formalmente.
Ambos, a partir de 1981, dieron a conocer en México el Wushu, convirtiéndose en los pioneros, no tan solo del territorio mexicano, sino también de Norteamérica.
Por esa intensa actividad Valles se retiró de las competencias de combate. Eran tiempos en los cuales los reglamentos de competencia resultaban muy variados por los diferentes estilos.
Complicado uniformar las reglas de combate porque en karate estaba prohibido el contacto directo, en el tae kwon do sí era permitido, en algunos no se aceptaba peto, careta y guantelete, en otros sí.
Con el transcurrir del tiempo cada disciplina formó su propia asociación y federación.
Francisco Valles, sin dejar su propia academia, fundó la primera Asociación Estatal de Wushu con sede en Nuevo León que congrega a todos los clubes y gimnasios de este deporte y formó parte de la fundación de la Federación Mexicana de esta disciplina.
Quien esto escribe fue testigo de estas experiencias vividas por el maestro Valles, como testigo fue de la actividad en Monterrey de quien hoy es un prestigiado Shifu en Chicago, damos fe de que Blas Hernández, es un maestro reconocido desde sus inicios en México y en la Unión Americana.
EN LOS 70 Y 80 EL KUNG FU MÁS CONOCIDO
En Estados Unidos, México y prácticamente en América Latina se conocía más el Kung Fu, un estilo con un corte más occidental que asiático, popularizado en los años de 1972 a 1975 con la teleserie Kung Fu estelarizada por David Carradine.
Inicialmente los productores tenían contemplado como principal actor a Bruce Lee, un auténtico exponente de las artes marciales, pero lo descartaron por su origen asiático y querían a un actor con rasgos más occidentales ya que las historias de los 63 capítulos, que comprendía la teleserie, se desarrollaba más en la época del Viejo Oeste.
Prefirieron a Carradine quien no era practicante de ningún arte marcial, mucho menos asiático, por eso sus actuaciones a la hora de aplicar el Kung Fu eran carentes de destreza, movimientos nada técnicos, antiestéticos que distaban mucho de ser diestro guerrero.
En cambio Bruce Lee había popularizado el Kung Fu con varias películas de gran impacto, Operación Dragón la cinta más famosa. Tenía otros proyectos fílmicos pero falleció en 1973 a la edad de 32 años. Dejó de herencia su sistema de combate conocido como Jeet Kune Do (camino del puño interceptor).
Aparecieron más personajes en arte marciales de renombre y actores de cine y TV: Steven Seagal, Chuck Norris, Jackie Chan, Jean-Claude Van Damm, entre otros tantos exhibiendo el poder del Kung Fu, Karate-Do, Kendo, Judo, de cuyo deporte se filmó una película La Leyenda del Judo en la década de los 60 estelarizada por Toshiro Mifune.
DE DISCIPLINA DESCONOCIDA AL WUSHU POPULAR
Pero el Wushu en las Américas en esos tiempos no aparecía en el lenguaje de ningún reconocido exponente de las artes marciales, tampoco en asociación, club o gimnasio, mucho menos en películas, hasta que en 1981 en Monterrey, Nuevo León, el maestro mexicano Francisco Valles inició el movimiento en pro de esta disciplina deportiva.
BLAS HERNÁNDEZ DE BUENA ESCUELA
Esta reseña sobre el arte marcial chino en México, es con el propósito de avalar que el maestro Blas Hernández tuvo una enseñanza formal y oficial desde hace poco más de 30 años en la academia de Francisco Valles.
Hernández aprendió el Wushu, motivado por su vocación de ser competidor e instructor, dominó los aspectos tácticos, técnicos, formas, diversos estilos de combate y defensa a manos libres y con armas clásicas o tradicionales.
Pero el maestro Hernández fue más lejos, emigró a Estados Unidos para fortalecer la maestría en este famoso arte marcial que asimiló con habilidad y destreza.
Con su visión pedagógica y su filosofía emprendió la difícil empresa de difundir la disciplina china en un país donde había muchos gimnasios y clubes de las más diferentes artes: karate-do, karate polinesio, kendo, zumo, tae kwon do, el Jeet Kune Do creado por el fallecido Bruce Lee pero pirateado por algunos que se ostentaban haber sido sus discípulos y herederos. El único heredero fue su hijo Brandon Lee, quien al igual que su padre, su muerte fue un misterio.
Había variedad de lugares con nombres rimbombantes, apantallantes y la mayoría de los dueños de esos clubes o eran algunos aventurados que medio aprendieron en algún dojo, o veteranos de la guerra de Vietnam que decían dominaban el Vovinam Viet Vo Dao, disciplina dada a conocer oficialmente en 1939 por su creador y fundador Nguyen Loc en Saigón.
Años anteriores había algunos veteranos de la guerra de Corea, quienes en menor grado habían iniciado algunos gimnasios del tae kwon do.
En cambio sí hay maestros tanto estadounidenses como japoneses, coreanos, argentinos y mexicanos, entre otras nacionalidades certificados que, con seriedad impulsan las técnicas más variadas de las artes marciales, inclusive las más violentas que son más de espectáculo extremo.
PIONERO DEL WUSHU EN ESTADOS UNIDOS
Blas Hernández no tendría el camino fácil para difundir el Wushu, disciplina prácticamente aún algo desconocida en Estados Unidos, por lo tanto, hizo lo que el maestro Valles promovió en México, lo combinó con Kung Fu, el nombre más popular desde las décadas de los 70 y 80.
Cristalizó sus proyectos, fue convenciendo con hechos a la comunidad sobre las bondades del arte marcial chino, que el deporte es uno de los caminos para que la niñez, juventud y adultos adquieran el equilibrio físico-atlético y mental, que hombres y mujeres pueden dominar obteniendo grandes beneficios en salud y seguridad.
EMPRENDEDOR A TODA LEY
Blas Hernández, con su residencia formal en Estados Unidos, siguió con mucho entusiasmo sus proyectos, avanzó con astucia, tenacidad, con lealtad, siempre con el orgullo y el honor de ser mexicano, de la raza de bronce pero con temple de acero que tiene principios, valores, moral, honestidad y disciplina.
Fundó en Chicago la sucursal del Wulin Instituto de Wushu-Kung Fu, tiene otra academia en Stone Park y como lo señala maestro Blas Hernández, la matriz está en Monterrey, la que hace décadas fundó Francisco Valles, quien ha sido invitado a visitar sus gimnasios en Chicago a impartir clases especiales.
El maestro Hernández tiene una visión de emprendedor de tal suerte que fundó la Federación Latina de Artes Marciales de América (FLAMA es el acrónimo).
RECONOCIMIENTOS POR SU TALENTO
Blas Hernández se ha convertido en uno de los máximos exponentes de esta disciplina en Estados Unidos, es el primero y único representante de Wulin en el vecino país, donde es reconocido nacional e internacionalmente.
Tanto así que desde hace muchos años tiene una estrecha amistad y ha compartido experiencias con famosos exponentes de las artes marciales como Chuck Norris, con quien participó en una exhibición en 1995.
El maestro Hernández es un personaje mexicano por excelencia muy respetado y querido por la comunidad donde él convive y comparte sus conocimientos, por su vocación de servir, no tan solo a sus paisanos o a la comunidad latinoamericana, sino a las personas de todas nacionalidades.
CURSOS GRATUITOS
Si bien es entendible que sus gimnasios donde se imparten los entrenamientos del Wushu, son sus medios de sustento y hay cuotas por las clases, entrenamientos y preparación para competir, también brinda cursos gratuitos.
En efecto, por ser compartido imparte cursos, sin costo, de defensa personal para mujeres, hombres, niños, jóvenes y adultos mayores en virtud a que hay circunstancias de inseguridad y casos de violencia en algunos sectores de Chicago y Stone Park, que afectan también a los niños, de ahí que la disciplina china es una herramienta válida para prevenir y contar con un recurso de autodefensa.
Blas Hernández es un personaje que también realiza labor social en comunidades necesitadas, por muchos importantes motivos ha sido reconocido en varias partes de la Unión Americana. Por ejemplo, en el estado de Ohio, en el 2002, fue ingresado al Salón de La Fama de Estados Unidos en reconocimiento por su labor como maestro de Wushu-Kung Fu y ser un ciudadano ejemplar.
Esta brillante trayectoria del maestro Blas Hernández, registrada a lo largo de tres décadas de constancia, dedicación, entrega, empeño, disciplina y conducta ejemplar, como lo han demostrado millones, no tan solo de mexicanos, también latinoamericanos, es una franca demostración de que a Estados Unidos llega gente de bien.
Honor a quien honor merece, justo es que Blas Hernández, mexicano y regiomontano por excelencia, sea reconocido y respetado en Estados Unidos por su talento y ser persona honorable.